“Mantener el equilibrio del pH es clave para la salud y el bienestar”. Este es el título con el que empieza un interesante artículo sobre la alcalinidad en el Periódico, diario de prestigio de España. En él se habla sobre todo lo que envuelve la alcalinidad y sus 4 Pilares, con referencias de investigadores que lo abalan y con consejos y sugerencias al respecto. A continuación haremos un resumen de los puntos más destacados del artículo para todos aquellos que no lo pudisteis disfrutar.

El cuerpo humano se mueve en una dicotomía de pH ácido-alcalina, tal y como apuntó en 1937 el descubridor de a vitamina C y premio Nobel, Albert Szent Györgyi:

El cuerpo es alcalino por diseño, pero sus funciones y metabolismo son acidificantes

Se refería a que todos los procesos metabólicos del organismo producen constantemente enormes cantidades de ácido que de deben eliminar vía orina, sudor, respiración y defecación. Y a la vez, para poder funcionar apropiadamente, todas las células y los tejidos necesitan un entorno alcalino que de deberán obtener de: alimentos alcalinizantes, abundante agua rica en minerales e iones negativos y aire puro rico en oxígeno. Debido a la bioquímica humana es más fácil acidificarse que alcalinizarse dado que para compensar una molécula de ácido son necesarias 20 moléculas con efecto alcalinizante.

Según Alkaline Care, empresa pionera y referente en alcalinidad en España, el exceso de ácido se produce no solo por las propias funciones metabólicas del cuerpo, sino por un desequilibrio en la dieta y estilo de vida occidental que genera una sobreacidificación de las células, tejidos y órganos.

CÍRCULO VICIOSO. La sangre se mantiene siempre en un pH de 7’365 y 7’4. El organismo hará lo que sea necesario para mantener el pH de la sangre en su estado alcalino natural y, para ello, si no consigue eliminar los tóxicos de forma normal a través de la piel, riñones, pulmones e intestinos, buscará mecanismos como acumularlo en los tejidos. Entonces el sistema linfático intentará eliminarlos de allí, lanzándolos de nuevo a la sangre, y generando un círculo vicioso que puede acabar ocasionando serios problemas de salud, desde pérdida de energía, irritación o congestión hasta enfermedades graves como diabetes y cáncer.

PODER ALCALINO. Los especialistas aseguran que la mejor forma de actuar contra el desequilibrio ácido-alcalino es aplicando cuatro sencillos pilares: nutrición, hidratación, remineralización y desintoxicación del organismo. Lo que se traduce en alimentarse de forma adecuada, beber suficiente agua alcalina, reponer regularmente los minerales que perdemos y limpiar el cuerpo de tóxicos ácidos de forma periódica. Los alimentos con un mayor poder alcalinizante son básicamente las verduras y en especial las de hoja verde, así como las legumbres, semillas y frutos secos. Otra cuestión relevante en la dieta es la de sustituir la sal de mesa refinada por otras más naturales libres de aditivos químicos.

Lo ideal para mantener el equilibrio es que un 80% de los alimentos de la dieta sean alcalinizantes y que un 20% sean no tan alcalinizantes, pero saludables. Asimismo, se recomienda tomar alimentos crudos en abundancia y, en menor proporción, cocinados de forma saludable. Para aquellas personas que no están acostumbradas a comer alimentos crudos se recomienda hacer la transición gradual para adaptarse a los nuevos hábitos alimenticios.

COMPLEMENTOS. Además de una alimentación alcalina, existen complementos alimenticios alcalinizantes naturales que contribuyen a equilibrar el pH del organismo. Las principales sales minerales son el calcio, potasio, magnesio y sodio. Estas se encuentran e manera natural en el organismo, pero se consumen rápidamente para combatir el exceso de ácido si el cuerpo no dispone de otros recursos alcalinizantes. pHour Salts es un complemento alimenticio que contiene estas cuatro sales naturales y que ayuda a remineralizar el organismo contrarrestando la acidez.

Otra de las vías de administrar al organismo los recursos alcalinos que necesita es a través del agua. Se puede conseguir un agua alcalina cargada de iones negativos añadiendo unas pocas gotas de una solución acuosa con sales minerales, como el PuripHy. Ambos productos los comercializa Alkaline Care.

Como afirma un estudio llevado a cabo en 2009 por la Universidad de Cambridge publicado en la revista británica de nutrición British Journal of Nutricion:

La investigación disponible demuestra convincentemente que la acidosis inducida por la dieta es un fenómeno real, y que tiene un efecto fisiopatológico clínico a largo plazo significativo, que debería reconocerse y contrarrestarse potencialmente por medios dietéticos