Cada vez es mayor el número de personas con intolerancia a la lactosa.
Entre los trastornos producidos por esta intolerancia se encuentran: diarreas, flatulencias, retortijones, rinitis, conjuntivitis, erupciones, alergia, principio de asma, fatiga, artritis en la rodilla y otros muchos.
Hay que distinguir entre la leche animal y la materna, la primera está compuesta por un 80% de Alfa albuminas y un 20% de Beta caseína (distintos tipos de proteína), la cual produce muchas alergias y la segunda se compone de un 80% de Alfa caseína y un 20% de Beta albúminas, que es perfectamente asimilable por el organismo.
No solo no previene fracturas óseas, sino que puede contribuir a una mayor tasa de mortalidad especialmente en mujeres, advierten científicos suecos. Multiplica las probabilidades de morir por enfermedades cardíacas y aumentar fracturas de cadera, ya que provoca una respuesta inflamatoria en los huesos haciendo que sean más frágiles.
Un estudios sobre nutrición recogido en el libro ” El estudio de China”, recoge:
“¿Cuál era la proteína que se mostraba decididamente como promotora del cáncer? La caseína, la cual conforma el 87% de la proteína en la leche de vaca, promueve todos los estadios del cáncer. Cuál era la proteína que no se mostraba como promotora del cáncer incluso en dosis altas? Las proteínas de origen vegetal, por ejemplo de trigo y soja”.
Una vida más alcalina y la incorporación de complementos alcalinos ayudarás a reforzar tus huesos.